Su nombre es de procedencia árabe, al qutn, debido a que, con toda probabilidad, el algodón fue originario de Oriente Próximo y del Valle del Nilo.
El algodón es una planta perteneciente al género gossypium, de la que existe una gran multitud de especies o variedades que se vienen dando a medida que su cultivo se ha extendido por todo el planeta.
Para la fabricación de tejidos el algodón ya fue utilizado por los hebreos, como consta en pasajes bíblicos, pero resulta difícil datar su antigüedad.
La fibra del algodón es como una cinta granulosa, estirada y retorcida. En algunas variedades, el de mejor calidad, la fibra tiene forma casi cilíndrica. Está compuesto a base moléculas de celulosa, con la estructura molecular típica de ésta.
Características
- Retiene del 45 al 50% de su peso en agua: es fresco y su uso resulta confortable.
- Mercerización: tratamiento químico dado al algodón a base de sosa cáustica, que, además del brillo que produce en él, aumenta su resistencia a la tracción en un 50% (pudiéndose así hilar más fino) e incrementa su afinidad por los colorantes, con lo cual no se produce el fenómeno de descarga en el proceso de tintura. Este tratamiento fue inventado en 1884 por el tintorero inglés John Mercer, en Lancashire.
- No tiene estabilidad frente a la conservación de la forma y hay que conferírsela mediante tratamientos mecánicos o químicos, como el sanforizado (encogimiento previo a base de temperatura, presión y humedad en el sentido de
- la urdimbre).
- Se arruga, aunque hay tratamientos químicos para evitarlo.
- Es más económico que las fibras animales.
- Arde, huele a papel quemado.
- Resiste mal a los ácidos y bien a las lejías.
Como en el caso de otras fibras naturales, la del algodón es aprovechable por completo.
Instrucciones de cuidado y conservación
- MUY RESISTENTE AL LAVADO, SE PUEDE FROTAR Y ESCURRIR
- SE PUEDE PLANCHAR FÁCILMENTE, MEJOR QUE EL TEJIDO ESTÉ HUMEDECIDO
- PUEDE LIMPIARSE EN SECO
Y para no variar con la costumbre, los sómbolos de cuidado son los siguientes.